El sexo interesa a todos, y se quiera o no, la pornografía es sexo en su expresión real, nos gusta amar como se aman en las porno (al menos a los hombres). Pero la pornografía es profesional. La hace y la producen personas dedicadas a ello en cuerpo (por supuesto) y también en alma. Hay personas que aprenden de sexo (posiciones, maneras de amar, incluso a acariciar, viendo películas porno) y esto es bueno, malo sería no poder acceder este tipo de situaciones, donde lo principal es lujuria, pero en un gramo se aprende.
De ese modo hay porno mexicano, que vale la pena porque se hace con más ganas que noción y ese detalle es un plus, un agregado antes que otra cosa. Pero les decía de la prostitución ¿se acuerdan?, que en México no permite el porno profesional.
Es más fácil, y no sé porque, que una chica se dedique al sexo privado que al sexo publico en un video, una chica de buen ver (y mejor tocar) se decide antes por el centro nocturno que por hacer un video porno en México. Curioso detalle de la pasión nacional, pero sucede.
Desde mi punto de vista no habrá porno profesional en México mientras la prositución sea mejor opción para las chicas, y es que sí lo notas, hay prostitución en todas partes del país, del porno solo esfuerzos, puros esfuerzos a los que se les critica en grande, pero que cuando se logre grabar con toda la deliciosa pasión mexicana, será un exitazo.
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